Todo el mundo sabe que no existe algo así como el auto perfecto, la bici perfecta o la moto perfecta para una persona; todos quisieramos que esto o aquello pudiera ser diferente, tanto para ajustarse a alguna necesidad personal como para distinguirnos del montón. Por ello mucha gente se dedica a modificar sus vehículos hasta obtener uno que en particular llene sus deseos, de ahí la popular cultura del "tuning" o el hecho de que la mayor parte de las mountain bikes sean armadas de piezas compradas individualmente por sus dueños. Aplicando el mismo principio, yo diseñé desde un buen rato atrás la moto ideal para mi; la moto de mis sueños, la moto que quisiera tener si sólo pudiera tener una, y que pudiera servir a la mayor cantidad de propósitos posibles. Es imposible que sea una moto para todo, pero esto es lo más cercano que pude llegar: mi Dream bike. Espero que no se quede sólo en el texto, y algún día tener los medios y el tiempo para construirla, la verdad no es tan imposible:

No sé si todas estas modificaciones son técnicamente posibles, pero sé que la mayoría lo son. Tampoco tengo el costo aproximado del proceso total, pero seguramente estará por encima de los US$ 50k, eso sin contar que probablemente toda la mano de obra calificada está en el gabacho. Este proyecto nació inspirado en las Sportster de calle modificadas por Storz para lucir como máquinas de Dirt Track (ya saben que me fascina), y yo le añadí elementos para hacer la moto más caminera y de calle, tomados del Supermotard.